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La hipocresía también es una forma de violencia

A propósito de la marcha convocada bajo la consigna #NiUnaMenos, el miércoles 19 de octubre, programas de radio y televisión, diarios, agencias, empresas y usuarios de redes sociales mostraron su adherencia a la consigna. Pero lo que surgió como una marcha en contra de los femicidios y de la violencia contra la mujer derivó en propuestas varias.

Además, como quedaba "re progre" poner la consigna en cada corte publicitario y compartir el hashtag, muchos medios de comunicación, programas y sitios web se sumaron con la imagen, las frases y hasta la camiseta de la convocatoria. Algunos otros aprovecharon para manifestarse contra todo tipo de violencia, no ya sólo contra la mujer, sino contra menores, grupos minoritarios e incluso contra la violencia animal. La ocasión también fue propicia para que diversos partidos o agrupaciones políticas tergiversaran la consigna inicial y aprovecharon para hacer, precisamente, política. También se generaron diversos posteos en las redes sociales, de hombres y mujeres, que se sumaron a la causa, aportaron reflexiones y hasta hicieron catarsis y denuncias online.

Al día siguiente de la marcha por #NiUnaMenos violaron a una chica en Mar del Plata. A los dos días, detuvieron a una pareja por violar su beba de 11 meses. A los tres días, detuvieron a un hombre que mató a tres mujeres de su familia y que hirió a dos menores...

¿Y entonces?

Visualizar estas problemáticas es el primer paso. Pero hace falta mucho más: políticas de estado, leyes, cambios de mentalidad y sobre todo, un trabajo que se construye día a día desde el lugar de cada uno. Y dejando de lado la hipocresía.

Porque queda muy bien sumarse a la consigna un día en particular, por unas horitas. Pero lo importante es mantenerlo al día siguiente y los demás días. En la forma en la que nos relacionamos con los demás, en los prejuicios que mantenemos, en las estructuras que repetimos, en las frases que incorporamos... ejercemos violencia. Y eso es lo que hay que cambiar, sino no cambia nada y todo vuelve a la "normalidad" luego de la protesta.

El día de la convocatoria puse esto en mi perfil de Facebook:

Para poder decir en verdad #NiUnaMenos (o ni uno menos, o ni nadie menos) deberíamos cortar un poquito con la hipocresía. Porque "queda bien" que por un día cambiemos la foto de perfil, nos vistamos de negro o compartamos la manito con el corazón en las redes sociales. Pero si hoy hacemos eso y mañana volvemos a darle rating a programas que te muestran a la mujer como un objeto sexual y la descalifican, si mirás informativos "serios" con un conductor en camisa y una conductora en minifalda y escote, si el tipo que hoy se pone la camiseta en la marcha mañana hace comentarios misóginos en su trabajo... ¿Sabés qué? Es lo mismo que hoy hubieses dicho #NiUnaMenos o #MilanesasConPuré. La violencia contra la mujer, y cualquier tipo de violencia, no se termina con repetir consignas pseudoprogresistas. NI UNA MENOS se construye todos los días, desde que te levantás hasta que te vas a dormir. Trabajá para que no haya ni una menos desde tu lugar, no sólo hoy, sino mañana, pasado mañana y la semana que viene también.

PD: y además, tengamos en claro que el problema siempre va a estar en el abusador/violador y en la sociedad que lo acompaña y no en el largo de la pollera...

Y es que creo que el primer paso es terminar con la hipocresía.

No salgas a una marcha, no cambies tu foto de perfil, no te vistas de negro, no te pongas la camiseta con la consigna. Simplemente, trabajá todo el tiempo para que no haya #NiUnaMenos.

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